Graduación de Magisterio 2018


            Llevo dos noches seguidas desvelándome entre las 06,00h y las 06,30h de la mañana, y lo peor no es eso. Lo peor es que luego hasta las 08,00h de la mañana no vuelvo a coger el sueño y ahí me pego dos horas escuchando la radio. Total, que para cuando me vuelvo a dormir me tengo que levantar. El primer día para entrenar y estudiar, y el segundo día porque tocaba graduación. La de los alumnos de Magisterio, Trabajo Social y Sociología en la UPNA, lo que yo no sabía es que nos íbamos a encontrar tantas caras conocidas en lo que a la mañana se refiere por lo menos.


            Esta mañana nos hemos levantado con la triste noticia de que José María Íñigo había fallecido de madrugada a los 75 años de edad tras haber estado luchando durante dos años contra un cáncer que finalmente y desgraciadamente le ha ganado la batalla, así que con esas hemos desayunado.


            No es que yo fuera a graduarme pero Iñaki me ha “obligado” en cierto modo a ponerme corbata, pero sin quitarle a él el protagonismo, así que he cambiado el traje (que estaba claro que no me iba a poner) por algo más convencional, pero con corbata.


            Así que por allá que hemos aparecido cuando el reloj marcaba las 11,30h y aún faltaba media hora para que comenzara el evento. Un incesante ir y venir de gente, de los cuales al primero que me he acercado a saludar ha sido a Martín Sáez. El de “Martín, Martín, Martín” de clase de Fer en Jaso, sí; el mismo al que Federico le contestó “¡Que amansa las fieras!” cuando este le preguntó qué clase de música iba a poner Edu en clase de Lengua. (Momentos épicos donde los haya que ya explicaré con más detenimiento algún día si hago algún especial sobre Jaso).


            Justo después la ama y yo hemos cruzado el polideportivo de lado a lado para saludar a los abuelos y a la madre de Andrea Maeztu Redín, que se graduaba también hoy. Me ha faltado ver a Deyo, que estudió conmigo Oboe- o yo estudié con él, como queráis- no se sabe ni hace cuantos años. Que buenos ratos pasamos juntos en el Blanca de Navarra (sobre todo)- conciertos aparte-. Pero no ha habido mucho tiempo porque iban a dar las 12,00h y el acto iba a dar inicio.


            Total, que a las 12,02h ha dado comienzo la “Graduación” en sí con la entrada de todos los que se graduaban a la vez que sonaban las 4 estaciones de Vivaldi y el público irrumpía en pie con un sonoro y largo aplauso.


            Lo siguiente ha sido el discurso de los alumnos. Lo han hecho “a tres”, un alumno por cada carrera y la verdad es que ha sido bastante ameno. Han empezado con los agradecimientos- incluyendo al personal de la cafetería- y han continuado repartiendo “zascas”, la mayoría de los cuales estaban dirigidos a la Universidad en general y a la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales en particular.


            En ese momento se han reído los alumnos, hasta que luego el Decano ha tomado la palabra y les ha recordado que el lunes tendrían que seguir para ir terminando el TFG. Ha habido un momento de risas para cada uno.


            También han hablado los padrinos y cabría destacar en la intervención de Iñaki Andueza- exdirector del CP Alaitz de Barañain en donde yo estuve de prácticas junto a Izaskun Juanto en el séptimo semestre- el jocoso comentario que ha soltado cuando les ha recomendado a todos los graduandos que se cercioraran bien de que la firma del título fuese válida, haciendo un claro guiño al Máster de Cifuentes, a la que aún sin nombrarla el público ha roto en un efusivo aplauso.


            Tras ello, han pasado a recoger el papel que les dan para hacer el paripé- porque aún no han acabado el grado- y ahí hemos podido conocer que Uxue Ezpeleta- estudió conmigo en Jaso- se graduaba de Trabajo Social- creo-. Entre las personas de renombre Iñaki Aranaz, Iratxe Amigorena- justo delante del hermano de un servidor, y la cual estudio una asignatura del título propio de Religión en la UPNA el año pasado conmigo-, Íñigo Martínez, Irati Medina, María Romero, Lorea Rodriguez- ¡Mery, no me la has presentado!- Andrés Sáez- hermano del anterior nombrado Martín, y que también estudió conmigo en Jaso- y Claudia Lafuente- hermana de Leti e hija de tita Ana-.


            Tras el paripé he tenido la opción de saludar y felicitar a Irati Medina, a Uxue Ezpeleta y a Andrés Sáez, y tras un efusivo saludo para tita Ana y Leti me he ido a buscar a María para darle un fuerte abrazo y felicitarla en condiciones.

María Romero y un servidor dentro del Pabellón
Universitario de la UPNA tras la Graduación.


            Tocaban fotos así que después de las correspondientes junto a sus padres- a David lo he saludado porque lo conocía pero a su madre le he dado dos besos, pero sin presentarnos ni nada… Jajaja- a sus hermanos- Silvia y David- y a Iván, no me iba a quedar con las ganas y así lo demuestra la imagen que acompaña estas líneas. Tras ello hemos estado un ratillo hablando mientras buscábamos a Leti para plasmar nuestra “amestad” pero no ha sido posible; no la hemos vuelto a ver…


            Después la sesión de fotos me ha tocado a mí, junto a la familia: junto a Iñaki, mis padres, mi abuela paterna… Pero aún antes de ello nos hemos juntado con Pablo Sáez- hermano de los anteriores nombrados Andrés y Martín- y con Chorroto y su señora que habían subido desde Carcastillo porque se graduaba la novia de su hijo el mayor, Daniel Gárriz.

Iñaki Aranaz y servidor en las afueras del
Pabellón Universitario de la UPNA.


            En ese momento la Mery y yo ya nos hemos despedido porque unos se iban a comer al Tubal y otros lo iban a hacer en casa. Como de costumbre en esos días, comida demás- postres aparte- porque mi madre se pasó ayer media tarde en la cocina y esta mañana ha pasado tres cuartos de lo mismo.


            A los postres han venido Claudia- que también ha estado por la mañana en la gradu (y me han vetado su foto)-, mis abuelos maternos y mi tía Isabel, y la verdad es que ha sobrado bastante poco; el helado de turrón y el pastel Fabiola- que decimos nosotros- han volado.


            Y no me gustaría alargarme con todo lo que ha dado de sí la noche, porque aparte de decir que María la iba a celebrar en Gorraiz e Iñaki iba a hacer lo propio en el Don Carlos no se me ocurre nada jocoso que contar.


            Nos vamos, volvemos la semana que viene con la que será ya la entrega 146ª del Tras el valle. ¡Os esperamos, porque ya saben que esto sin ustedes al otro lado carecería de sentido y no hubiera sido posible! Gabon.

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