Tras el valle de Aranaz

Leti, María y yo jamás seremos amigos. Es imposible ser amigos sin amistad y si entre nosotros hay “amestad” es algo que no vamos a poder ni remediarlo ni cambiarlo. “Amest-u” en euskera significa soñar y es algo que me ha pasado con ambas. Puede ser que quizás esto este metido un poco con calzador pero es así. Me hacía mucha ilusión estar con ellas, hacía mucho que no quedábamos en plan bien, porque ver y hablar si que nos hemos visto y hablado. Me hace mucha ilusión que conozcáis esta “amestad” tan profunda y cuidada que tenemos entre los tres que comenzó en Roma y la cual no creo que tenga fin. Hace unos días les comentaba a unas compañeras de clase- a Lorea Hernández y a Usoa Elícegui concretamente- que no es que no concebiría mi vida sin ellas. Pero se me haría raro. Quizás os esperéis una nueva entrega de los especiales de Roma, pero no. Esta claro que también va a aparecer gente relacionado con aquella primera vez en la Ciudad Eterna, pero no es casualidad. Estos “pe

El día que confesé que el novio de Naiara Adín me parecía realmente atractivo yo creo que ya dije todo lo que tenía que decir de mi. Sé que en aquel “Hablemos de...(IV)” en el que también hable sobre Aitziber Leoz (podéis leerlo pinchando aquí ) quedé un tanto en entredicho, y quizás con lo que comente hoy también lo haga. Es algo muy difícil de superar, ya que no fue nada fácil confesar tal cosa, pero lo vamos a intentar. Lo de hoy- creo- no va ser tan fuerte como lo de aquel día, pero conmigo nunca se sabe. Mi intención para el artículo de esta noche, el octogésimo noveno ya- seguimos #CaminitoDel100- es hablar de diversas cosas, y espero que me dé tiempo a todas. Si os soy sincero no pensaba que este artículo iba a llegar tan pronto pero tras lo visto anoche en Cuéntame y previendo lo que vendrá la semana que viene no lo podía dejar pasar. La serie protagonizada por los Alcántara va a ser uno de los piares de hoy, pero no comentando el último capítulo en sí, sino analizand

Cuantas veces me pasa…Cuantas veces me pasa querer adelantarme a los acontecimientos televisivos y al final tener que cambiar sobre lo que pensaba escribir. Soy consciente de que muchas veces lo hago por el mero hecho de faltarme espacio o desviarme mucho del tema, pero para una vez que iba a cumplir la promesa del viernes pasado… Me es imposible. El pasado día 10 Telecinco estrenaba La voz kids y Antena 3 hacía lo propio con Tu cara no me suena todavía. Ambas se estrenaron en plena forma, y a pesar de que la Cadena de Fuencarral (T5) tuviera más espectadores, fue la de Planeta (A3) quien se llevó el gato al agua en lo que al share se refiere. Entre las dos apuestas más vistas de la noche del viernes pasado sumaron más de un 50% de share y supongo que hoy (si es viernes) volverán a repetir ese magnífico duelo de titanes entre Manel Fuentes (acompañado por Ángel Llacer, Mónica Naranjo, Miki Nadal y Chenoa) y Jesús Vázquez (acompañado por Tania Llasera, David Bisbal, Antonio Or

Llevamos una semanas de locos en lo que al tema de identidad de género se refiere y ya era hora de que me pronunciara acerca de ello.   He procurado leer mucho y ver más de un video para concienciarme de que nuestros genitales no determinan si somos hombres o mujeres. Hasta hace poco tiempo- y según lo que aprendí en la ikastola- si os soy sincero, pensaba que era así, pero estaba equivocado. Vamos a centrarnos en la transexualidad infantil. E n Navarra hay alrededor de 100 menores en esta situación.   Para empezar deberíamos saber que la transexualidad en nuestra sociedad es una realidad. Una realidad que se está empezando a visualizar. Lo que nos viene a decir la transexualidad es el hecho propio de que la especie humana, las personas, somos hombres y mujeres y no podemos no ser otra cosa. Tenemos sexo, somos hombres, somos mujeres y efectivamente los hombres están sexuados habitualmente (que no normalmente) en modo masculino, y las mujeres mayormente en modo femenino. P

Admitámoslo. Todos hemos sido un poco kamikaces alguna vez. Todos nos la hemos jugado por el mero hecho del morbo que da(ba) desafiar a nuestra madre y todos nos hemos ganado un zapatillazo de más (Maldita puntería...). Yo también. ¿Quién no ha dicho nunca un “mu” por lo bajini cuando su madre le soltaba una de sus frases estrella como la del título. Yo creo que todos. Y lo peor no era soltar ese “mu”, ya que si no lo escuchaba no pasaba nada, pero ya sabéis que las madres tienen todos los sentidos superdesarrollados y tan solo oliéndote saben con quién has estado, donde y por qué. No me preguntéis como lo saben, pero eso es así. Total que lo peor no es que digas el “mu”, sino que lo peor es que tu madre lo oiga, que lo creas o no “nueve de cada 10” madres lo escuchan. Igual tienes suerte y tu madre es esa “una” que no lo escucha, pero me da a mi que no. Un viernes más estamos aquí, comenzando marzo con alegría y dejando un mes de febrero que será muy difícil superar en lo que a