"Pedazitos" de mi (II)

Reza la promo del programa que este es “un espacio diferente y con sello propio” en el que yo siendo el “critico personal” de Obama´s Channel hablaré de viajes, os recomendaré lugares a visitar (o a evitar), cine, música, series, libros, programas de televisión, etc.

Así que hoy, coincidiendo con esta segunda entrega de mis “pedazitos” os voy a recomendar la ciudad de Vitoria- Gasteiz. La visité el martes 28 del mes pasado y no fue casualidad. Era el cumpleaños de Aitziber Leoz, pero como de ella ya hablé la semana pasada, hoy toca empezar hablando de Laura Antón. Rakel, si me da tiempo también lo haré sobre ti.

Hacía mucho que no veía a Laura. El viernes pasado dije que el último día que la había visto fue en nuestra Graduación en abril de este año (podéis leer el articulo sobre la fiesta que no dejó indiferente a nadie pinchando aquí), pero me quiere sonar que algún día pasé por tu casa por no se qué que tenía que hablar Nuria con Izas y solo estabas tú.

Pero a lo que vamos (la gente que quiera leer tu monográfico lo podrá hacer pinchando aquí), y es que aprovechando que los padres de uno iban a ir a la capital de la CAV, porque sí, aunque parezca increíble la capital de Euskadi no es Bilbao; para allá que nos fuimos quedando frente a la Facultad de letras. A Rakel, no le sorprenderá que habría llegado tarde, porque a pesar de citarnos a las 10,00h, no nos vimos hasta las 10,35h pasadas, pero eran cosas del directo; que le vamos a hacer…

Y si el abrazo a Aitzi fue emotivo, el que me di con Laura fue mucho más. Me (“nos”, quiero creer) hacía tanta ilusión estar con ella que de nuevo- como el que conté el día 2- fue indescriptible. Lo primero que me preguntó, para amortizar un poco la mañana, fue preguntarme por la cosas que no conocía, y que le iba a decir si no las conocía… En fin… Le hablé de la Virgen Blanca, del caminante, de la UPV, del Artium, de Mendizorotza, del Corte Inglés gazteiztarra y de la Catedral, asique no quedaba mucho por conocer.

Luego, cuando di una vuelta con mi aita, vimos la estación de buses, pero vamos a lo que me enseñaste. Lo primero, la Florida, una especie de la pamplonesa Plaza del Castillo, pero con un quiosco (o “kiosko”) más pequeño, y con una plaza mas chiquituja en la cual no me quise hacer una foto. De allí pasamos a ver el belén a tamaño real que pone el ayuntamiento, pero como también lo conocía de camino a la Plaza de la Virgen Blanca, (ahora ya sin hierbienes), me enseñaste una escultura que se llamaba “La visión” o “El ojo”. Me acuerdo de como era conocida por todo el mundo, pero yo creo que evitaremos su nombre.

Es posible que Amaia Urabayen también se acuerde del nombre, porque si el 28 me la enseñaste a mi, supongo que unos días más tarde se la enseñarías a ella, ¿No, Lau? Supongo que no te podrás quejar de visitas. En una semana has tenido vistas de dos ex compañeros – y actualmente amigos-de clase. ¿Que más se puede pedir?

A parte de esto, visita a la Virgen Blanca- a pesar de que la imagen que está no sea la de verdad-, dejando a una lado a Plaza de España- o como le llaméis ahora (jajajaja)-, foto con la imagen de portada y canción de Zeledón (¿es con Z, como los pedaZitos?) que me cantaste en castellano, ya que la versión en euskera era muy reciente y no te la sabías. Me explicaste un poquillo de donde bajaba el muñeco, hasta la ventana de la Caja Vital (creo que era), y subimos hasta donde se podía para sacarnos una foto con el protagonista de las fiestas. Esa foto, ya que no me gusta nada, la vamos a omitir, aunque si queréis verla, lo podréis hacer en el Instagram de Laura- si no lo tiene cerrado- sino mala suerte…

Vimos también las Catedrales (por fuera). La nueva, con falta de “muñequitos” según Laura- entiéndanse “apóstoles”-, y la vieja, en obras. Vimos el gaztetxe, hablamos de disfraces de Nochevieja y de tus vestidos para esa última noche de año- muy apropiados para entrar en el gaztetxe-, del mercado medieval, y de cosas, entre las que podríamos contar que fuiste tú la que me convenciste para que felicitara a Aitziber por su cumpleaños. Al final te hice caso…

Descubriste hasta un lugar de tu propia ciudad que desconocías, pero a parte de ello, hablar de lo nuestro, que no veo nada relevante que destacar… Me echaste en cara lo de no acordarme de que te había mandado una canción por tu cumple, y ahora caigo que igual te canté la de “Con un canto en los dientes” hablando sobre la amistad. ¿Puede ser? Recordamos cosas como tu felicitación “in extremis” y lo de haberte nombrado en TEVDA con calzador el 29 de ese mes que nos gusta tanto a ambos.

Como veis, creo que como guía turístico no tengo precio, y eso que Laura intentó enseñarme diferentes cosas. Una más de la que me acuerdo ahora… Los Fueros. Nos quedaron por ver Ajuriaenea y el Parlamento, pero eso se me quedó para la segunda vuelta con mi aita. No voy a comparar a “Siberia”- Gasteiz con Iruña, pero de la rasca que hacía aquel día dan fe mis guantes y el gorro de Laura.

Estoy escribiendo estas líneas de madrugada, me inspira la noche. Me acabo de asomar a la ventana y acabo de ver la pasarela en la que nos quedábamos hablando más de una vez; a estas horas vacía. Del examen de Javier, dándome tus ideas, hablando de ayuntamientos- y de concejos (jajaja)- o de Velvet. De más cosas vale, pero no se pueden contar. El mismo martes por la noche, pasando de vuelta a casa, me quedé unos segundos parado en ella. Se te echa tanto de menos Laura…

De lo mejor de aquel día fue que saldé la deuda que tenía con la amiga, y le dí lo que le prometí hace algún tiempo, ¡y con intereses! No hace falta decir de que hablo. Ya he quedado muy bien así. El día que le dí a Izas para que se las diera a mis críos de Barañain, te quedaste un poco celosilla, asique no podía ir sin ellas. Lo tenía en mente.

Y una vez más sin quererlo, hemos llegado al final de este segundo reencuentro. Sé que falta el de Rakel, con la cual iré mañana a ver a Osasuna (contra el Barça) a El Sadar, pero no se cuando llegará, ya que quiero volver a escribir sobre Roma, y espero que sea la semana que viene. No cierro estos especiales en primer lugar por esto. Y en segundo, porque Izas, también me gustaría reencontrarme contigo. El día 22 en Barañain sería una muy buena ocasión. ¿Te animas a ir?

Señores, una semana más gracias por estar ahí, porque ya saben que esto sin ustedes carecería de sentido y no sería posible.

¡Feliz fin de semana, y aunque cada vez cueste más, Aúpa Osasuna!