"Pedazitos" de mi (VI)

Lo admito. Me has liado. Yo que no pensaba escribir nada sobre nuestro reencuentro un año y medio (menos un día) después aquí me tienes. No me atrevería a decir que es un TEVDA “por encargo” pero en cierto modo es así.

Laura y un servidor en la Plaza de la Virgen Blanca de Vitoria- Gasteiz.

Pero a parte de ello me hace muchísima ilusión volver a hablar sobre ti, podríamos llamarla una “ilusión al cuadrado”, porque al igual que es algo que me ilusiona a mi, creo que eres una de las pocas personas que me ha dicho que le gusta salir aquí; que le gusta que le dedique un programa y es que con este ya vas a llevar tres.

Y se me hace difícil no hacerlo por lo que me dijiste públicamente el martes de esta semana que está a punto de concluir- vale, es cierto, aún queda el fin de semana-. Dice el dicho que es de bien nacidos ser agradecidos así que va a pasar de ser un “encargo” a un “hago esto porque me da la gana y porque Laura se merece esto y más”. Laura. Marialau. Laura Antón.

Me voy a intentar poner lo menos sensiblero posible pero en realidad no sé si lo voy a conseguir. Así que eso, no me gustaría ser responsable de lo que leáis a partir de aquí aunque en realidad lo sea.

Lau, gracias por existir.

A lo largo de tu vida vas a encontrarte a un montón de amigos, más de los que nunca habrías imaginado, más de los que tiene Justin Bieber en Facebook. Bueno, quizás no tantos. Y os diré algo, gracias a ellos sois quienes sois. Y sólo por eso ya les debéis un par de cañas, un café o una tarde de película y palomitas, por el resto de vuestras vidas.

Existen muchos tipos de amigos. Aquellos con los que sales de fiesta, que son capaces de beberse un cubata de un trago y no sabes cómo pero conocen a todos los dueños de las discotecas. Y esos amigos te gustan mucho. Pero no tanto como los de clase o los del trabajo. Esos te pasan apuntes, te dicen lo que te perdiste el día anterior mientras estabas dormido, y de vez en cuando te dicen alguna respuesta del examen tipo test; los que te ayudan en el examen a desarrollar ya no entran en esta categoría.

También están los amigos del “hola, ¿cómo te va?”. Esos te escriben de vez en cuando por Facebook y, maldita sea, de vez en cuando se ríen con “jeje”, y ya sabes que sólo por eso no son de fiar. Esos tipos de amigos te los encuentras de fiesta y están dispuestos a invitarte a todos los chupitos que haga falta, pero te los encuentras en el autobús y miran hacia otro lado. Y, por último, están los amigos de verdad. Especie en extinción según los documentales de La 2.

Los amigos de verdad son difíciles de encontrar. Dicen que se cuentan con los dedos de la mano, y Laura está dentro de esa mano. Se lo dije hará unos día pero me gustaría repetírselo ahora: ¡eres alguien fundamental en mi vida y me costaría mucho creer a alguien que me dijera que fueras a fallarme o a decepcionarme! (Y voy a hacer un apunte, lo de “fallarme” lo vamos a entrecomillar por lo que pasó el 22 de abril- más bien por lo que no pasó jajaja- pero veo muy difícil que me decepciones). Eres una de las mejores amigas que uno podría desear y te lo digo de todo corazón.

Con el permiso de Jon te voy a decir que te quiero un montón- y mira que me cuesta mostrar mis sentimientos públicamente-, pero es que es tan top tener una amiga como tú… Bufff… Sería muy interesante que tuvieras la ocasión de verte desde fuera con retrospectiva- desde un “yo” que no fueras tú (no sé si me explico)- para que vieses lo que te estás perdiendo al no tener la posibilidad de tenerte como amiga. Te lo digo en serio.

Eres de lo mejor que hay. Yo no te voy a decir eso de “te como la vida” pero ten por seguro que vales mucho (a mi, por lo menos, me vales y para echar la mañana sacas de un apuro a cualquiera. Jajajajaja).

Y es que… que sería de estos artículos sin alguna pulla como la puesta entre paréntesis. No hace falta decir que es broma (¿o va en serio?), pero yo lo aclaro por si acaso. Jajaja.

Total que desde el 29 de noviembre del 2016- sí, el famoso día del cumpleaños de Aitziber Leoz (e Itxaso Ollo, vale)- que no nos veíamos y aunque los audios que me haces no tengan precio sí que echaba de menos el darte un abrazo, el darte unas piruletas- aunque no fueran de la farmacia de mi aita- y el estar un rato hablando contigo. De cosas importantes, porque a pesar de que las casi cuatro horas que estuvimos se nos hicieran cortísimas también hubo tiempo para comentar alguna que otra chorrada.

A medida que voy escribiendo estas líneas se me van ocurriendo muchas de las cosas que te empecé a contar el lunes pero que tras cualquier interrupción para hacer el comentario oportuno que fuera se me iba el santo al cielo y no me volvía. Y hablo en primera persona pero a ti también te pasó alguna vez.

Sería un poco absurdo contar que a pesar de que quedáramos a las 10.00h Laura apareció a las 10.08h, que de lo que me apetecía ver un campo de Primera División (ya que es posible que Osasuna ni llegue a jugar los playoffs de ascenso; habrá que ver que es lo que pasa mañana frente al Valladolid en el Nuevo José Zorrilla) fuimos a Mendizorrotza pasando por un barrio de pijos del cual Jon igual querría saber algo (o igual no). Y llámame “puto” Lau, aquí te lo voy a permitir.

Sería también absurdo deciros que a media mañana fuimos a tomar algo en uno de los bares de la Plaza de la Virgen Blanca, que fui a su “ordenadísima” casa y que conocí a su hermano Alejandro, pero la cuestión es que Vitoria es mejor que Pamplona. Para Laura claro está.

Porque a aparte de tranvía y de Centros Cívicos en cada barrio (que aquí esto último yo lo compararía con los Civivox a pesar de que la amiga dijera que no) no me supo dar ninguna razón de más peso.

Y ahí empezamos a hablar de que Iruña tenía dos patrones (San Fermín y San Saturnino, a pesar de que el nuestro fuera el segundo y el primero fuera copatrono de Navarra). Supimos deducir que San Prudencio era patrón de Álava, aunque de Vitoria la amiga pensara que Celedón pudiera ocupar ese papel. ¿La Virgen Blanca, no? Le dije y yo, a lo que ella no supo responder con seguridad.

Hablamos de series como La verdad protagonizada por Elena Rivera- y volvió a salir el tema de que Jon Kortajarena era gay a pesar de que yo pensara que estaba saliendo con La vecina rubia, la cual Laura me dijo que creía que era de la misma capital alavesa-, de programas culinarios- vale, de MasterChef-, me enseñó fotos en las que aparecía- como la canción- “bonita de más”, pero también vi fotos con las que me reí mucho muchísimo. La de su comunión. Y como quiero que juguemos en igualdad de condiciones te voy a dar la oportunidad de que veas una de las muchas que me hicieron a mi pinchando aquí. Es de un artículo (el 101) de hará un año por estas fechas, pero la foto para que puedas reírte- si quieres- ahí la tienes.

Prosigamos- palabra (o sinónimo de la misma) que Laura utilizó muchísimo el lunes-. Conocimos cosas del otro. Yo por ejempló me enteré de que la amiga había sido jugadora del Alavés femenino en categoría inferiores y ella conoció de mi que… No es el caso. A mi, por cierto, se me quedó en el tintero hacerle la misma pregunta que ella me hizo mientras el pintxo y yo le contesté. Por privado, por favor.

Lo que no sería absurdo sería hablar del viaje de Laura por América Latina junto a Eider Murguialday y Jon Ramos. Por Paraguay (aunque no fuera “para” nada “guay”), por las Cataratas, por el desierto de sal y los pelícanos rosas al fondo, por el tercer pueblo más alto del mundo (cuyo nombre no me viene a la memoria) y costaba respirar hasta subiendo “escaleras seguidas” (genial el apunte de “seguidas” que me hizo la amiga), por La Paz (aunque ya no sea la capital de Bolivia), por Cuzco y Machupichu (a pesar de no haber fotos por temas que no nos incumben- pero ni a ella ni a mi-)…

Y no sería absurdo porque como te dije podrías escribir un libro sobre las aventuras que viviste. Lo que sería absurdo es contarlas yo. Por eso desde estas líneas me gustaría invitarte a sentarte en el TEVDA con nosotros (vale, “conmigo”, pero el plural mayestático suena mejor) y a contarnos lo mejor (y peor) de aquel verano que empezó (aquí) en agosto y terminó a mediados de febrero (allá). Tienes tanto que contar… Me encantaría. Y así podríamos dar pie a un viaje juntos en autocaravana cuando uno de los dos se decida a sacarse por fin el carné de conducir.

Lo dejamos aquí. Creedme cuando os digo que me ha encantado escribir un tercer programa sobre Laura- ¡gracias por proponérmelo!; un segundo reencuentro a pesar de que estos “PedaZitos de mi” estuvieran planteados para hacer uno sobre cada persona y ya.

Gracias Lau, porque contigo los momentos de humor son la leche, pero los sentimentales son impagables y es en estos cuando nuestra amistad vuela de verdad.

Y gracias a ustedes por haberos pasado por aquí una semana más en un programa en el que nos hemos pasado incluso de las tres páginas. Nos despedimos con la esperanza de que Laura se atreverá a sentarse en nuestro sofá. Y gracias porque ya saben que esto sin ustedes al otro lado carecería de sentido y no sería posible.

¡Muy feliz fin de semana familia! Gabon.