Accidentalmente pequeños

Procuro ser totalmente sincero con vosotros y no falto a la verdad diciéndoos que esta noche pensaba hablar de otra cosa de lo que voy a hacer al final. Era realmente complicado superar el febrero del año pasado en cuanto a audiencias se refiere, pero puesto que ya lo hemos hecho y teniendo en cuenta que aún faltan unos días para que termine el mes- posiblemente consigáis las 3.000 visitas en el blog siendo el mes más visto de toda la historia- hemos pensado guardar el programa planteado para hoy para cuando vengan tiempos de vacas flacas ya que es atemporal y tendría cabida en cualquier momento. Sólo os desvelaré el título: El curso en que me enamoré de ti.

Pero ya llegará el momento de hablar sobre ello. Porque hoy me gustaría empezar hablando sobre La voz kids que volvió a lunes a Telecinco superando holgadamente el 20% de share consiguiendo ser lo más visto del prime time.

La cuestión es que el talent arrasó en su inició a pesar de ser el arranque menos visto de todas sus ediciones. aún así sacó más de 10 puntos de ventaja a los Maestros de la costura de La 1 de TVE que obtuvieron un meritorio segundo puesto.

De lo más comentado de la primera noche de la semana fue el contrapunto entre Antonio Orozco y Melendi con un casi desaparecido Jesús Vázquez y una Rosario Flores que ni fu ni fa. Y digo “contrapunto” entre Orozco y Melendi porque mientras el primero estuvo desatado y a carcajada limpia durante toda la noche, el segundo estuvo más ausente que nunca, siendo demasiado seco y parco en palabras a lo largo de las primeras audiciones a ciegas; algo que no pasó desapercibido para la audiencia. ¿ El porqué? Cualquiera sabe…

Las actuaciones fueron muchas y muy variadas pero me gustaría quedarme con dos. En primer lugar con Ályson, ya que a pesar de que no consiguiera formar parte de ningún equipo, a todos nos sorprendió su naturalidad, lo bien que se lo tomó y como le dedico la canción- citando textualmente- a su “pobre perro”. En segundo lugar, y ya haciendo un poquito de patria, me gustaría detenerme en Miriam, la cual entró a formar parte del equipo de Melendi en los últimos segundos de su actuación ya que el ovetense esperó hasta ese momento para pulsar el botón rojo y para que el sillón se iluminara de luz haciendo ver claramente eso de “Quiero tu voz”. Esa misma noche nos enteramos de que la pamplonesa era “almuna” del director de esta casa, Manuel Owono. Veremos como continúa en el concurso, y sí quizás es la cuarta ganadora “kid”.

Y aparte del talent show, esta noche también me gustaría quedarme en la Cadena de Fuencarral, para comentar el final de El accidente, la serie protagonizada por Quim Gutierrez e Inma Cuesta que echó el cierre el martes pasado frente a casi 3 millones de espectadores y un buen 17,5% de la audiencia televisiva del prime time.

Sería muy difícil decir que la serie tuvo un buen final y es que para la mayoría de los espectadores no fue así. Hubiera sido un buen final de primera temporada previendo una segunda, pero va a ser que no. Una vez más, una serie más. Y no una cualquiera. Una serie más que deja el final más que abierto a pesar de haberse planteado como una única temporada. ¿Por que nos hacen estos las televisiones y los guionistas?

Las quejas en las redes sociales fueron muchas, no me extraña, pero dejando la polémica a un lado y las incógnitas sin resolver esto es lo que pasó grosso modo en el capítulo final:

Lucía acudió a su encuentro furtivo con Jose, pero cuando vio a María todas las piezas encajaron en su cabeza y comprendió que todo había sido un montaje para engañar a Joao. De esta manera, llegó el momento de convertirse en testigos protegidos con una nueva identidad y lejos de Zarza, a la que nunca podrían volver.

Cuando ella le contó sus planeas a Juan, este le confesó que había estado enamorado de ella desde antes de casarse con su hermano y le pidió que no pensase en Jose y que no le arrastrasen sus decisiones. Y aunque en un principio le dijera que no podía hacer eso, al final Lucía decidió abandonar a Jose e irse con su hermano

Entretanto, Joao descubrió- gracias al marido de la vecina cotilla- que María seguía viva en el hotel. En ese momento también Lucía se despidió de Jose al que dejó con Samuel para un último encuentro. En ese instante, ella se acercó a María para pedirle que cuidara de su marido.

Pero cuando ya parecía que se iban a escapar, aparecieron Joao y sus hombres que habían puesto un localizador en la maleta de Lucía y se habían enterado de que- como hemos dicho- María seguía con vida.

Y fue entonces cuando comenzó un tiroteo dejando a varios policías muertos y a Jose herido. Y esto duró hasta que la familia de Lucía- padre, hermano y Juan- encontraron a Joao y mataron a Lula por error en vez de al malo malísimo que había tenido la serie. Al mismo tiempo Jose decidía acabar con el tiroteo dentro del hotel sacrificándose y muriendo, a la vez que Lucía pistola en mano acribillaba al hombre de Joao a balazos tras haber acabado este con la vida se su marido.

Finalmente, en una última secuencia en la que la lluvía empapaba a todos los protagonistas, vimos como María conseguía escapar con la ayuda de Nacho. Lo mismo que Lucía y Juan que se marchaban juntos- ¿y revueltos?-. En la escena final descubrímos que Lucía había empezado una nueva vida junto a Juan y sus dos hijos al lado de mar. “Tengo dos hijos y una nueva vida por delante. No he olvidado el pasado pero intento no tenerlo presente todo el tiempo. Tal vez sea una fantasía pero creo que he olvidado a los que tanto daño me hicieron” decía ella en off.

Y si la serie hubiera acabado así no hubiera estado mal, la cuestión es que en los últimos 30 segundos todo dio un giro inesperado, ya que en un plano más abierto de la imagen de la playa vimos a Joao observando a la estampa familiar desde lejos con unos prismáticos.

Pero las cuestiones son las siguiente:

1. ¿Dónde está la madre de Jose? No se sabe que pasa con la señora que había “vivido” en la casa de su nuera toda la temporada.

2. ¿Se podría creer que Joao en un descuido de Manuel- el hermano de Lucía- se quitó a Lula de encima y escapó- irónicamente- a todo gas atropellando el cuerpo de su hermana en la huída con su silla 4x4 para así librarse de la cárcel y llegar hasta la playa por sí mismo porque todos sus hombres ya estaba muertos?

3. ¿Qué pasa con la vecina y el marido? ¿Se escapan?

4. ¿Y con los policías?

5. ¿Y con la familia de Lucía?

Como veis quedan muchos frentes abiertos, aún y todo- hablando ya un poco a broma- lo que nos hubiera encantado ver sería a la vecina cotilla pillándose un hotelito al lado del de Lucía o a la misma vecina con los prismáticos en vez de Joao. Hubiera sido un final apoteósico.

Termina febrero, comienza marzo.

Gracias. ¡Feliz fin de semana!