TV Show
Esta semana, al ser de “Carpa”, nos tomamos un respiro y
dejando a un lado los especiales de “Hablemos de...” pasamos a hablar de
televisión cambiando también de día. El articulo de hoy lo dividiremos en dos
partes. La primera, esta:
Realitys
Los
consumidores de realitys están en su semana fantástica porque todas las cadenas
han sacado la artillería pesada. El lunes fue Antena 3 la que puso en danza a
los participantes de Top dance, con más habilidades para el drama que
para el baile, dicho sea de paso. El martes la Sexta tomaba el relevo de emisora
por las que ha pasado Pekín expréss y lo hacía con una edición que
promete. Cristina Pedroche no dijo ninguna frase que mereciese un pormenorizado
ensayo y cedió todo el protagonismo a unos concursantes que prometen dar lo que
se espera de ellos. ¿Aventura? No, ilusos. Broncas. Que es lo que da vida a
cualquier reality. Y si no que se lo pregunten a Carlos Lozano, que encadenando
discusiones en GH VIP se ha plantado en la final, y tras ello presentará
una nueva temporada de Granjero busca esposa, sustituyendo a Lujan
Argüelles. En Pekín expréss hay dos gogós que ya han revolucionado, a
base de tanga, a medio Sri Lanka y que no han dejado indiferentes al resto de
concursantes. Casi no se habían presentado y ya las estaban votando para que se
convirtiesen en “ovejas negras”. A ellas lógicamente ser las más controvertidas
les importó entre poco y nada. Para ser las villanas del programa deberán
competir con Quintín, uno de los integrantes de la pareja de desconocidos, que
armo la de San “Quintín” cuando le tocó dormir en una casa donde no tenían
toallas para ducharse y decidiera coger una sábana para secarse.. Tremenda
afrenta. El muchacho algo sabe de los entresijos de la tele. Ha pasado por La
ruleta de Jorge Fernández- que por cierto, el viernes protagonizó el último
Dos días y una noche de la cadena de Planeta-, Ahora caigo y Conexión
Samantha. Le faltaba un reality y ya lo tiene. Para el año que viene podría
aspirar a entrar en MasterChef, aunque si llama mucho la atención tal
vez se quede a las puertas. Es lo que le pasó el miércoles a una modelo
venezolana que había sido portada de Interviú, a la mujer de un
exfutbolista y a una joven de Filipinas que había dejado su trabajo para entrar
en el concurso y le puso ojitos de cordero degollado a Jordi Cruz. Pero no le
sirvió de nada. Tendrán que intentarlo en otro reality. En el culinario este
año, al parecer se han puesto serios. El Got Talent de los sábados está
llegando a su final (aunque aún queden varias galas). Que prueben suerte en Supervivientes,
que está a la vuelta de la esquina en Telecinco. O en el de las monjas mismo,
que promete y acaba de arrancar hace poco en Cuatro.
Series
El martes, a
pesar del arrollador 27,2% de share y los casi 5 millones de espectadores ( más
de 6.500.000 contando los que lo vieron en diferido) que congregó el martes la
longeva serie de Telecinco al inicio de la novena temporada, las tramas, en mi
opinión no estuvieron a la altura de la audiencia. Hablamos, cómo no, de La
que se avecina. #LQSAHaVuelto fue TT durante toda la noche y sólo fue
superada (en Twitter) por los seguidores de Cristina Pedroche y “La Ruta de los
Elefantes” ya que #PekinExpress dominó en lo que a las redes sociales se
refiere. Respecto a la audiencia tampoco le fue mal. El cambio de Antena 3 a
la Sexta, le hizo perder un millón de espectadores (1,6 fueron los que obtuvo)
pero respecto al share obtuvo un 8,6% y superó a Cuatro. El octavo capítulo de Allí
abajo logró 3,3 millones de espectadores en Antena 3 y El caso se
hundió en La 1 de TVE. La cosa es que La que se avecina, se enfrente a
quien se enfrente, siempre triunfa.
Se esperaba
un gran estreno y la verdad es que a la gente en las redes sociales así le
pareció. Personalmente me pareció un inicio bastante soso sin una potente trama
central y sin la necesidad de presentar a los nuevos personajes. Aún y todo la
audiencia respondió. El pasado jueves 31 de marzo a Vis a vis le pasó
todo lo contrario; a pesar de la potencia con la que empezó, la audiencia no la
acogió y se vio superada tanto por Gran Hermano, como por Cuéntame
cómo pasó. La ficción carcelaria de Cruz del Sur no llegó a los
3.000.000 de espectadores. Ayer vimos tres cuartos de lo mismo y Maca y
compañía se desplomaron con tan solo 2,5 millones. Antena 3 debería pensar en
cambiarla de día, y podría hacerlo al miércoles, tras el final de Buscando
el norte.
La cadena de Planeta dio el pistoletazo de salida a
la segunda temporada de Vis a vis
en la complicada noche del jueves, y lo hizo convencida de tener un caballo
ganador. Y a juzgar por lo visto en el primer episodio es así, pues el thriller
de Globomedia regresó manteniendo intacto su trepidante ritmo narrativo, su
excelente propuesta visual y logró llevar a sus personajes más al límite si
cabe, planteando un inicio de temporada muy prometedor.
El primer episodio de la segunda temporada arrancó donde
dejó al espectador en el desenlace de la primera tanda de episodios, con parte
de las presas fugándose de Cruz del Sur. Desde ahí nació una huída que
cambiar´çia para siempre la vida de las protagonistas, colocándolas desde el
inicio en un punto totalmente diferente, obligadas a adaptarse, a evolucionar,
aunque quizá no sea para bien.
Para los que pensaban que el frenético ritmo de las tramas
podría terminar lastrando a la ficción, este capítulo demostró que sus
guionistas no tienen ningún miedo a seguir quemando cartuchos en orden a situar
a sus personajes en puntos completamente diferentes. Vis a vis regresó
reinventándose para que su esencia siguiera intacta, endureciendo las normas
dentro de la prisión (con todo lo que ello acarreará para reclusas y
carceleros) y recrudeciendo la batalla por la supervivencia en el exterior,
donde la familia de Maca continuará en el punto de mira tanto de la familia del
Egipcio como de la policía.
La huída
obligada de Maca llevó a nuestra protagonista a dar un salto al vacío
cometiendo dos asesinatos: el primero de ellos, un homicidio involuntario que
complicó mucho su puesta en libertad a corto plazo, siendo el segundo (del cual
no fue autora material, pero sí responsable) el que probablemente hará mella en
la joven, marcándola para siempre.
Maca deberá
ahora asimilar su nueva situación, además de lidiar nuevamente con Zulema, a
quien había engañado inicialmente. Tras un respiro inicial de la mano de la
breve libertad, Maca tendrá que enfrentarse ahora a las consecuencias de sus
actos en una cárcel que ha recrudecido todavía más sus condiciones y en la que
sus aliados cuentan con menos poder cada día.
Respecto a
la comedia de la cadena de Fuencarral, que cambió de día- del lunes al martes-,
para empezar nos encontramos con la nueva vida de los cuquis, forrados de
dinero y Amador como un mantenido. A la Chusa como chacha y a la nueva
asistente social con ganas de que Amador le hiciera un trabajo fino para tener
la oportunidad de devolverles a sus hijos, ya que por el momento no parece que
tengan el mejor “ecosistema” posible. Una chacha yonki y p*** que de vez en
cuando se seguía haciendo taxistas. Una madre que cada día estaba con un hombre
distinto y con un padre alcohólico que se pasaba todas las noches de bar en bar
ahogando las penas en alcohol en busca de alguna que otra fresca.
El momento
más emotivo de Amador llegó en el funeral de Leo- “Leopoldo” dijo el cura a
pesar de que fuera “Leonardo”-, que los directores decidieron cargárselo, ya
que Luis Miguel Seguí decidió dejar la serie. Alba Recio- todavía sin ser
transexual del todo, cosa que supimos gracias a Antonio- le regaló un salto en paracaídas
al friki del edificio con tan mala suerte que este no se abrió y su cuerpo
parece ser que quedó desfigurado en su impacto contra el suelo. Amador fue
quien dijo unas palabras con ese modo de hablar que solo Leo podía traducir. Lo
mejor de su interpretación llegó cuando tuvo que hablar en el funeral como su
mejor amigo y pregunto eso de “¿Qué somos? ¿Leones o huevones? ¡¡¡No te
oigo!!!” le decía gritando al féretro. A los que no vimos fueron a sus padres,
que sólo le habían mandado una corona.
Alba entró
en depresión y los Recio la llevaron a ver a Judith. La hija del matrimonio
cristiano se intento suicidar en un despiste de Judith, ya que la psicóloga
había encargado una nueva máquina para tonificar su cuerpo y al no funcionar el
ascensor los operarios la habían dejado en el portal. Todos los vecinos la
estaban gorroneando. De hecho, Araceli, Nines y Raquel no tuvieron más
protagonismo que ese. Al igual que Coque, que no tuvo ningún que hacer en el
primer episodio de la novena temporada.
Lo que todos
nos preguntamos fue porqué Judith seguía viviendo en el bajo, cuando Rebeca ya
no estaba en su casa. No hubo despedida para el personaje de María Adánez.
Nadie se preguntó en donde estaba y fue como si hubiera desaparecido de
repente. Cuando Judith tuvo que llevar a Alba al hospital, el nuevo equipo de
gobierno- Vicente y Fermín- aprovecharon para revender la máquna a mitad de
precio y así poder arreglar el ascensor, cosa inútil, ya que Enrique-
expresidente ya- había contratado un seguro. A Vicente lo vimos perdido, pero
el que estuvo magnífico fue Fernando Tejero en el papel de Fermín. Fue una de
las mejores representaciones.
Petra
Martínez- en el papel de Doña Fina- no se quedó atrás ya que sus disputas
contra Lola y Javi fueron de lo poco bueno que tuvo el capítulo. Pudimos ver a
una Lola con más pe(r)chonalidad que nunca- en los dos sentidos-. Ya que por un
lado sus dotes habían experimentado un crecimiento obvio y su mala leche contra
Doña Fina salió a reducir cuando esta le dio un cabezazo en la propia casa de
la anciana.
Dentro del
capítulo también cabria destacar la vuelta de Enrique a Montepinar, y ya como
nuevo acalde de municipio. El secretario de partido pensó en él como mindundi
que era para manejarlo a su antojo, pero el exconcejal de juventud y tiempo
libre no se amedrentó y dejó sin firmar varias cosas a la vez que rechazaba un
soborno de 10.000€ por parte de un trabajador del ayuntamiento.
Las tramas,
como de costumbre, fueron muy locas pero excesivas a la vez que había
personajes que aparecieron en el primer capítulo con calzador-Raquel, Nines,
Coque y Araceli- a la vez que Rebeca se esfumaba sin saber ni como ni porqué.
En mi humilde opinión un capítulo bastante soso, en el que los puntos graciosos
fueron muy pocos. El primero llegó cuando la Chusa dijo a Maite que la
asistente había llegado y como la cuqui estaba en la cama está le dijo a la
particular asistenta que la entretuviese, a la vez que esta le contestaba con
un típico “¡le pinsho?”.
El Recio
también tuvo su momento cuando, tras electrocutar a un gruísta por llevarse su
coche mal aparcado, se dio a la fuga con la grúa para pagar el dinero que
debían a la vez que un coche de la Guardia Civil les perseguía. Llegaron a las
19,55h, pero el “segurata” del banco les dijo que ya estaban cerrando
denegándoles el paso, y así las cosas, la policía consiguió arrestar al
mayorista, que se vio obligado a sacar del plan de pensiones el dinero porque
ninguno de los restaurantes a los que repartía pescado se dignaba a pagar lo
que debían.
Un capítulo
bastante soso, a mi parecer. Ya veremos como prosigue la temporada en los
próximos capítulos.
Si quieren,
para terminar, pueden volver a ver la Procesión del Encuentro que se celebró en
el municipio de Carcastillo el pasado Domingo de Resurrección y que es parte de
este cuadragésimo noveno programa como adelantamos el viernes.
Como siempre, gracias por estar ahí, y hoy, ya domingo... ¡¡¡Feliz semana y a por el lunes!!!
José Julio Aranaz (@jjaranaz94)
Comentarios
Publicar un comentario