Hablemos de...(II)
No me gusta
escribir en caliente, porque al ser una persona de impulsos pondría lo primero
que se me pasa por la cabeza y sería de todo menos cosas bonitas. Mi intención
es sacar lo mejor de la gente, y aquí me voy a centrar básicamente en ello.
Aunque haya aspectos negativos que no me gusten nada; estos los voy a dejar a
un lado y si llega el momento de hablar de esa(s) persona(s) pues ya veremos si
lo hago o no. Tengo que decir que este dilema me trastoca un poco mis planes
del orden en el que iba a escribir sobre las personas de clase, así que voy a
reorganizar ese planning- en el que estáis todos- y a ver que es lo que hago.
Pero lo primero es lo primero, y como
la semana pasada dije que iba a hablar de Laura (@Laura2LOL)- con la que creo
recordar no haber tenido ningún “conflicto” (por llamarlo así)-, pues a ello
que voy. Laura Antón, María Laura- que creo yo que lo aborrece- (de 22
años y con cumpleaños el 29 de abril, que buen mes,) es la boliviana, que vive
en Vitoria, es del Bilbao y estudia en Pamplona. Y la tontería esta de poner
también lo de “María” es por una vez que a mi me pareció que le salió un
“Joseju” un poco extraño- no se como explicarlo- y aquel día le conteste con un
“Marialau”, pero sin más.
Si vamos ha hablar de Laura- que me
ahorraré el “María” (aunque en el DNI lo ponga), aunque sea diferente al “kun”
de Izas del que hablaba la semana pasada- lo primero que tendremos que tener en
cuenta será su “argot”- barra (/) “jerga”, barrra (/) como lo quieras llamar- y
más que eso, sus dos palabras clave para entender su oratoria. La primera es
“tío”; en una buena conversación que se precie con Laura, es una palabra que no
puede faltar. Creeréis que habré querido decir “no debe faltar”, pero no. Es
imposible que en una conversación con ella esta palabra no se escuche. Entre
cuatro o cinco veces como mínimo y siempre acompañado de un “escúchame”, que es
la segunda palabra que tampoco puede faltar nunca.
De conversaciones con Laura se un
poco- últimamente menos, pero bueno…- y yo juraría que nunca la he escuchado
hablar sin un “tío” o un “escúchame”. Normalmente van las dos juntas, y si la
conversación me tiene de interlocutor no falta mi “escúchame”, pero cantado.
No es una crítica Laura, créeme, pero es una cosa- si me permites decirlo- un
tanto curiosa. También podríamos hablar de esas “Zetas” que metes cuando
deberían de ser “Ces”, pero dices que es por influencia de tu madre. No es que
no me lo crea, pero yo creo que tu madre dirá la “zeta” al hablar, y tu la
pones al escribir, pero bueno… Que no estoy aquí para hablar de lo mal o de lo
bien que escribes, que es muy probable que este artículo también tenga algún
que otro fallo ortográfico aunque se me conozca- muy escuetamente- con el
sobrenombre de “Señor RAE”.
El otro día al felicitar a una
amiga, le decía exactamente como nos habíamos conocido, pero con Laura este es
un dato que me falla. Realmente quiero creer que en primero de carrera no estábamos
juntos en la misma clase, pero tampoco te lo podría confirmar. Se que hay gente
como Aitziber Leatxe (@Aitziber_Leatxe) y Carmona (@JulenCarmona94) que no,
pero al hablar sobre ti me surgen dudas… Ya me corregirás tú si me confundo… Si
realmente, como digo, no estabas en primero conmigo, nos conoceríamos después,
y si estabas, pues mil disculpas, pero no me acuerdo.
De vista, si que te he conocido,
pero sin más. Cuando más nos hemos llegado a conocer a sido durante este último
curso, gracias a las optativas que hemos elegido ambos dos. Tanto en
Audiovisuales como en Educación para el Desarrollo, pero yo creo que nos hemos
conocido más en la segunda, ya que hasta que Leatxe llegara de Perú
(¿spoiler?), de la misma clase solo estábamos tú y yo. En clase de
Audiovisuales también contábamos con la ayuda- en el examen sobre todo- de
Amaia Urabayen (@AmaiaUrabayen) y sus habilidades para hacer imágenes para
sustituir a fotografías que no se habían podido tomar en el momento oportuno…
(Perdonad que me ría… Jajajajajajajajajajaja). En este momento solo Laura y
Amaia saben de qué estoy hablando, pero no os preocupéis, que todo llegará a su
tiempo. Y perdóname Laura, pero esto lo tengo que contar sí o sí.
Pues nada, resulta que en una de
esas clases de Audiovisuales con Alfredo Pina, en la que más de una vez
bajábamos a la cafe(tería) a por algo, resulta que entre “jijis” y “jajas”, en
el segundo tramo de escaleras para bajar, no se exactamente lo que hizo Laura,
pero resulta que se comió todo un tramo de escaleras del tirón; ocho u diez
escalones que bajó rodando con una técnica más que perfecta, que hasta que
Amaia y servidor vimos que no se había hecho nada no nos pudimos empezar a
reír. Como digo, la pena es que no haya un vídeo o una foto del momento exacto,
pero gracias a la habilidad de Amaia a la hora de utilizar Scratch- ¿se escribe
así? (un programa informático)- podemos revivir el momento como si estuvierais
ahí. Este es el cocris- que diría Diego Serrano- del momento exacto:
Luego también he tenido la fortuna
de haber tenido más de una conversación con ella cara a casa, en el Lago del
Sadar. En esos momentos he tenido la oportunidad de conocerla un poco más.
Tampoco nos hemos contado grandes cosas y la chispa que tiene una no la puedo
contar… ¡Que rabia! Mira que tenerme que morder la lengua cuando llega lo
interesante… En fin… Solo diré que se trata de algo relacionado con un antiguo
“amigovio”- que dice la RAE- con el que le estaba “pinchando”- no le busquéis
doble sentido, por favor- todo el rato, que no nombraré aquí. Y digo
“amigovio”, porque según la RAE es un término correcto, y mejor que la palabra
malsonante que estáis pensando todos. ¿Me explico, no?
En esas conversaciones también se han
discutidos preguntas de examen, respuestas, curiosidades de Velvet y demás, y
para que la verdad se dicha, Laura también me ha propuesto más de una respuesta
para el examen de Javier Erro, ya que teníamos que tener ejemplos, para
responder a las preguntas del examen- dichas con anterioridad por él-. Por eso
y más... ¡Gracias!
Lo que me sorprendió es lo que me
dijiste un día… ¡Que Jon Kortajarena era gay! Y para reproducir lo que vino
después, este artículo debería tener los dos rombos que se ponían antaño en
televisión, y no es plan…
Lo que si voy a contar es lo que me
dijiste un día tras ver una foto de Sara Sampió, la chica que veis en la imagen
de abajo. Poco agraciada físicamente la chica…
Lo digo sin acritud- como Juan Cuesta en la extinguida Aquí no
hay quien viva- pero lo digo, y es que en ese momento Laura se sintió
bastante fea, y no entiendo el porqué. Antes he nombrado a Amaia Urabayen, y
aunque no lo vaya a contar ahora, el día que hable de ella, contaré lo que pasó
el día que dije que me parecía guapa. ¡Si lo llego a saber no lo digo! Y ya que
estamos contaré toda la verdad, para dejar resueltas las dudas que pueda tener
la gente, ahora que los dos estamos como estamos ”compuestos y sin...”
Yo creo que el día que hable de lo
que pienso de Amaia el programa tendrá bastante miga, pero nadie sabe cuando
será, si os digo la verdad, ¡No lo se ni yo! Y teniendo en cuenta que la
próxima semana es Santa...
Pero sigamos hablando de Laura, que
hoy, es lo que toca.
Otra de las cosas que más curiosas
me parecen es la “adicción”- creo que la podemos llamar así sin problema
ninguno- que tiene la amiga a Star Wars. Si yo os contara las cosas que
le regala al novio… En fin… Doy fe de que ha visto todas las películas de la
saga, y pondría la mano en el fuego, que más de una y más de dos veces la
mayoría- por no decir todas-. ¡Yo no he visto ni una!
Más de una vez le he regalado una
especie de “tazos” de Star Wars que me han dado haciendo la compra en el
Leclerc y según me dice los tiene en una especie de “santuario” que tiene en un
rincón de su casa dedicado a Star Wars. Su cumpleaños está próximo-
falta poco más de un mes-, no seáis originales, sed prácticos y acertaréis.
Y otra cosa que podría contar,
relacionándolo con Izas, que se me olvidó contar la semana pasada, es que desde
enero, se apuntaron ambas a un curso de defensa personal femenina. No se si aún
seguirán, pero creo que empezar, empezaron… A parte de ello, y retomando una
cosa que se me olvidó decir la semana pasada, es que no se muy bien que
relación se creían que teníamos Izas y yo algunos profesores del Alaitz. Y el
que lo quiera entender que lo entienda, pero nada más lejos…
El día que hable de Amaia también
hablaré de las extinguidas “noches Velvet”, con Izas, Laura, Eider y alguno que
otro/a más, ya que me suena, que Irigoien- por lo menos- también
estaba por ahí
alguna que otra noche.
De Eider (Murguialday), poco puedo
decir, a parte de algún chascarrillo que otro, que contaré más adelante, pero a
ver si me invitáis algún día al café en vuestra casa, y puedo contar algo más.
De Laura, podría reproducir
conversaciones subidas de tono, con más personas como con la misma Amaia,
Aitziber Leatxe, y gente que no es de clase mientras hacíamos un trabajo para
Audiovisuales, pero no es plan de volver a poner los dos rombos, así que se
queda como secreto de confesión.
Y hablando de confesarse… Vamos ha
cambiar de tercio y vamos a hablar un poquito, por lo menos, de las Javieradas
celebradas las semanas anteriores. Y lo vamos ha hacer de una forma diferente a
la del año pasado. Os propongo dos programas de Navarra TV, uno Iglesia
navarra, de la mano del actual párroco de Burlada, y anteriormente de
Tafalla y Carcastillo- Alfredo Urzainqui- con una interesante entrevista y un
reportaje y el otro un especial llamado Destino Javier. El primero es
más cristiano; el segundo, más ameno.
Y no podía faltar también algo sobre
televisión, ya que el martes TVE estrenó El caso- de los creadores de El
Príncipe y Allí abajo- con buenos datos, a pesar de no despuntar
mucho por la prórroga y los penaltis de los octavos de final de la Champions en
Antena 3. Ayer acabó Bajo Sospecha con la duda de si la serie continuará
con una tercera temporada o no. La semana pasada terminó también Casados a
primera vista, y de eso vamos a hablar hoy, y es que, aunque al finalizar
la edición, la mitad de las parejas siguieran casadas, de diciembre- que se
grabo la final- a aquí han pasado muchas- demasiadas- cosas.
Las abuelas solían decir aquello de
“una vez te casarás y mil te arrepentirás”. Pero los tiempos modernos han
cambiado. Ahora en vez de esperar a los mil lamentos, las parejas deciden poner
pies en polvorosa y divorciarse antes. Un buen ejemplo son los cuatro
matrimonios de Casados a primera vista- dejando fuera el de Andrea y
Bernardo (que no superaron ni dos semanas de convivencia)-. Tras las ansias de
vestirse de blanco, y de chaqué con un desconocido, y disfrutar de una buena
luna de miel, se han separado. Dos de ellos (el matrimonio formado por Mónica y
Pedro, y el de Tito y Cristina) lo hicieron en la misma final que se emitió
hace dos lunes. Ellas querían seguir adelante, pero ellos les dieron calabazas
y firamarón la disolución. “¡Echo de menos a mis mujeres!” decía Tito jocoso y
aliviado. Sin embargo, otros cuatro valientes, Sabrina y Jonathan y José Ramón
y Alberto, decidieron continuar con su aventura conyugal fuera de los focos. De
eso hace ya tres meses, ya que terminaron de grabar- como hemos dicho- a
primeros de diciembre; y si, también han acabado divorciándose. Los primeros
por supuestos malos tratos, y os segundos, por la distancia a la hora de volver
al trabajo.
Y hoy, así me despido, con la
felicidad de haber tenido la ocasión de conocer, durante esta etapa, a Laura un
poco más y con la alegría de que la Semana Santa ya esta aquí siendo hoy
“Viernes de Dolores”. El viernes de la próxima semana emitiremos la procesión
del Santo Entierro de Carcastillo del año pasado y el primer viernes de Pascua
(1 de abril), ya veremos. Lo que vendrá después serán viernes importantes. El
8, el día de la Carpa. El 15, el siguiente a la Carpa, donde tendremos programa
importante. El 22, día del cumpleaños de un servidor, y el 29- cumpleaños de
Laura-, día anterior a la graduación de los de Magisterio. Nos viene un mes
repleto de acontecimientos, veremos también si los Tras el valle siguen
su curso.
¡Feliz Semana Santa, que empieza
pasado mañana con el Domingo de Ramos!
José Julio Aranaz (@jjaranaz94)
José Julio Aranaz (@jjaranaz94)
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